Forma de los ojos.

A parte de las formas  que ya hemos visto, grandes, hundidos y pequeños, debemos atender a la línea.

Debemos observar la línea que va desde el lagrimal hasta el extremo externo. Esta línea nos puede indicar tres direcciones:

Ascendente, cuando el lagrimal se situa es un punto más bajo que la terminación del ojo, entonces se le conoce como ojo almendrado y si su inclinación es más exagerada se conoce como ojo rasgado.

Horizontal, cuando los dos puntos están a la misma altura, se conoce como ojo normal.

Descendente o caído, cuando el lagrimal esta por encima del extremo del ojo.

Corrección del ojo HORIZONTAL:

La delineación y las sombras, en forma horizontal hará que este tipo de ojos se vean más redondos  creando la sensación de ojo más abierto. 

El eyeliner superior debe empezar próximo al lagrimal, ensanchando el trazo según vamos llegando al final.

El sombreado asomará por encima de la cuenca pero sólo en el final del ojo. En el párpado fijo, solo apliclaremos sombras desde el centro hasta el final y difuminaremos bien esos trazos. 

Evita:

·Las terminaciones donde se junte el eyeliner. (Ni en el lagrimal ni el final se debe unir.)

·Delinear la línea de abajo por dentro.

·Delinear la línea de las pestañas de abajo desde el lagrimal al final, favorece mucho más solo desde el medio hasta el final.

Corrección de ojo CAÍDO:

Para equilibrar un ojo caído, el eyeliner superior asciende a partir de la mitad del ojo. La delineación inferior se despega de las líneas de pestañas a partir de la mitad del ojo hacia el lagrimal. Podemos perfilar la parte interna del párpado desde la mitad del ojo hasta el final.

Evita:

·Perfilar los ojos siguiendo la línea a ras de pestañas llegando hasta el lagrimal. Con este línea le acentuaríamos la forma caída.

Corrección de un PÁRPADO CAÍDO:

Sombrearemos el final del ojo, rebasando el pliegue de la cuenta, para oscurecer el párpado y así esconder esa caída del párpado. 

El eyeliner superior debe ascender desde la mitad del ojo hacia el final.

Extenderemos las sombras hacia el párpado fijo reservando el punto de luz de la ceja. Mantenemos la luminosidad del párpado móvil desde el lagrimal hasta la mitad del ojo.

La delineación inferior puede juntarse o dejarse abierta tanto en el lagrimal, como en el exterior. 

Evita:

· Sombrear la cuenta interna del ojo, es decir, que solo sombrearemos la cuenca por el final del ojo, no debe meterse hacia dentro.